miércoles, 21 de septiembre de 2011

Santosnemi.blog

Eran los tiempos que en nuestros sueños confusos , los que habíamos sido enviados, sabíamos (o teníamos conciencia), que eran tiempos incomparables. Como el surfista que sube a la cresta de la ola, cuántas veces habrá imaginado ese momento cuando se preparó durante un tiempo breve terrestre. Hasta que por fin un día sintió que estaba lanzado a la experiencia directa, para eso se había preparado.Pero esta preparación era tan diferente. Mi Alma intuía que había recibido un entrenamiento de miles de años. Años contados en tiempo terrestre de sufrimientos, incorporación de experiencias a los cuerpos sutiles que están después del cuerpo físico y por detrás y por encima.

Y aquí me encontraba ahora, compartiendo con hermanos que sin saberlo, transcurrían sus últimos minutos cósmicos con mi propio ser.

(Continuará) si me sigues